La innovación en el sector hotelero no se restringe únicamente a las relacionadas con la tecnología. También alcanza al diseño de los establecimientos y a su equipamiento, tanto de las habitaciones como de sus espacios comunes. Nuevos espacios, líneas menos rígidas o más sostenibilidad son solo algunas de las que estarán más en boga en un futuro cercano. Y como es natural, los responsables de la gestión de un establecimiento hotelero deben tenerlas en cuenta.

Estar al día, tanto de las necesidades y gustos actuales de los clientes, como de lo último en diseño de establecimientos, puede marcar la diferencia para un hotel. Si un cliente detecta que un establecimiento tiene en cuenta sus preferencias y que se esfuerza en renovarlas, es probable que lo elija. Y si queda satisfecho, repetirá.

Tendencias en diseño y equipamiento en los hoteles

En el sector hotelero no hay nada inamovible. Todo puede cambiar si es necesario adaptarlo a los nuevos tiempos. También puede hacerse si se decide seguir una tendencia novedosa o anticiparse a los gustos y prioridades de los clientes. Así lo demuestran estas cinco tendencias en diseño de espacios y equipamientos, que están comenzando a seguir hoteles de todo el mundo.

  • Habitaciones de hotel menos rígidas. Los viajeros demandan cada vez habitaciones menos impersonales y más adaptados al tipo de estancia en ellos. La tendencia es a que parezcan más un pequeño hogar que un lugar donde dormir y asearse. Que cuenten con distintos tipos de habitación y varios ambientes. Las de tamaño medio están empezando a incorporar zonas adicionales a la de descanso. Por ejemplo, una pensada para reunirse con otros huéspedes o con visitas, con sofás y mesas de café.
  • Recepciones más cálidas. La recepción tradicional, con un escritorio tras el que se encuentra el personal del hotel trabajando, está empezando a pasar a la historia. En vez de un lobby convencional, son cada vez más los hoteles que apuestan por la creación de espacios abiertos. Las recepciones del futuro serán más parecidos a una sala de estar, que inviten no solo a utilizarlas como lugar de paso. La incorporación de la tecnología a los procesos de checkin y checkout también ha hecho posible que desaparezcan las colas. En los lobbys cada vez hay menos huéspedes esperando para registrar su entrada o salida. Disponer de tablets con apps para ello agilizan el proceso. El lobby cuenta ahora con otros espacios, como bar, zona de trabajo, máquinas expendedoras e, incluso, biblioteca.
  • Más atención a la sostenibilidad y a la conservación de la energía. Hace ya tiempo que la industria hotelera está esforzándose por utilizar sistemas energéticos más sostenibles. Y los está incluyendo en el diseño de nuevos establecimientos y la reforma de otros más antiguos. Entre las tendencias relacionadas con la sostenibilidad está la instalación de paneles solares. También el uso de madera reciclada en el mobiliario y los encargos de muebles y otros elementos a artesanos y fabricantes locales. Asimismo, han aumentado la apuesta por la iluminación natural.
  • Establecimientos inteligentes. La tecnología ha entrado en los hoteles con una fuerza imparable. La industria abraza los avances no solo para que la estancia en ellos sea más cómoda como para facilitar el trabajo de su plantilla. Esto lleva a los responsables de hoteles, por ejemplo, a dotar a las habitaciones de sistemas de ocio inteligentes. O de tablets con los que controlar diversos elementos de su alojamiento: cortinas, iluminación, etc. También a utilizar el Big Data para conocer más a sus huéspedes o a crear sistemas de mensajería instantánea para contactar con ellos. Además, pueden instalar paneles en recepción para ofrecer noticias destacadas e información metereológicas. O integrar sistemas de videoconferencia grupal en sus salas de reuniones. Todo sin olvidar puntos de recarga de dispositivos móviles, básicos para que los huéspedes puedan estar conectados en todo momento.
  • Más preocupación por la salud y el bienestar. En la última década, el turismo de salud ha crecido exponencialmente. España es uno de los países en los que más se está apostando por este tipo de turismo. Y no solo como concepto. También como una tendencia que no hay que dejar pasar en los hoteles. Poco a poco, los alojamientos empiezan a contar con gimnasios más sofisticados y spas. Y también han ampliado su oferta de servicios. Ahora tienen luces con tonos vigorizantes o relajantes, purificadores de aire, agua mineral de calidad de cortesía, etc. Además, sobre todo los que ofrecen habitaciones más amplias, están llevando los aparatos de gimnasia a las habitaciones. Los baños también recogen esta tendencia, con duchas con chorros de distinta intensidad o aromas. Las experiencias en los spas hace tiempo que dejaron de centrarse en los masajes para ofrecer más servicios de bienestar.

Como hemos comentado, estas tendencias no son independientes en muchos casos de las innovaciones tecnológicas en el sector. En muchas ocasiones, las novedades del sector en tecnología, equipamiento y diseño en los hoteles van de la mano para conseguir atraer clientes.